14/9/09

De Tlapiques y Michmoles





El tlapique y el michmole o michimole son otras comidas que nos recuerdan que venimos de una cultura que nació y creció en un continuó dialogo con el lago de Chalco-Xochimilco, a su alrededor o dentro del lago nuestros antepasados encontraban los elementos necesarios para satisfacer su hambre. Con un poco de imaginación y creatividad fueron combinando los ingredientes para crear distintos platillos a partir de unos pocos ingredientes.

Los dos son platillos tradicionales de la cocina lacustre del centro de México; no solo de Xochimilco, pues también los podemos encontrar en Tlahuac, Milpa Alta, Morelos, el estado de México y otros lugares cercanos.

Ambas comidas comparten los ingredientes: pescado, tomates, chile de árbol, epazote y cebolla. Pero la forma de prepararse son muy distintas y por tanto su sabor cambia. El tlapique es un ejemplo de cocina al vapor, pues básicamente se trata de un tamal de pescado que se asa hasta que esté completamente cocinado. En cambio el michmole, como le dicen las tías mayores de la familia, es un guisado de tomate y chile, en el cual se cocina el pescado.

Estas son la versiones en que conocemos, pues dichas comidas también nos remiten a los cambios sufridos tanto en la alimentación como en el entorno ecológico. Las tías recuerdan cómo endenantes (como lo cuentan) por las mañanas los tíos o abuelos tomaban su redes o fisgas y salían a pescar; en sus canoas recorrían las orillas de lagunas y acalotes, para volver a medio día con el resultado de su trabajo: acociles, pescado blanco, charales, michpetos, ajolotes o almejas, “lo que Dios socorriera”. Con todo lo que atrapaban en las redes, se hacía la comida.

Si era temporada de cuaresma pues el michmole; al tomate molido junto con el chile y sazonado con cebolla y epazote se le agregaban todos los peces, ajolotes, ranas o almejas que se hubieran pescado, todo junto se cocía.

Por eso dicen algunas tías que ya no preparan el michmole pues: “no es lo mismo, ya no sabe igual, ya no se consigue el pescado blanco, el ajolote o la almeja, pero lo voy a hacer para que lo pruebes”. Seguimos en espera de comerlo aunque sea en una versión sin pescado blanco o ajolote.

Por otro lado aunque el tlapique es una comida casera, podemos encontrar personas que lo venden en el mercado y los fines de semana en el barrio de Belén. Claro que adaptado a las nuevas condiciones, no sólo se encuentran de carpa, rana o pescado blanco, también de hueva, menudencias de pollo, mollejas y tilapias.

3 comentarios :

  1. Ojalá pudieran recopilar alguna receta de estas seguramente delicias culinarias para que no se pierdan y para que se difundan, ¿Que tal un recetario de la cocina de Xochimilco?. Solo espero que no maten los pocos ajolotes que quedan, mejor rana cultivada. Voy a ir al mercado local para comer estos platillos. Dr. Jorge Nicolás Cisneros. Mixcoac, D. F.

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  2. En una versión contemporánea se prepara el tlapique sin hoja de tamal, es decir solo el guisado que va dentro. Es verdad que el sabor cambia pero la práctica de comerlo es parecida. No se si alguien se haya preguntado porque se sigue comiendo sin cubiertos, es cuestión de juntar las llemas de las dedos en forma de cucharita y hacercarselo a la boca. Yo por convicción insisto en llamarle tlapique, tlapiquear.

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  3. esa informacion me ayuda a hacer mi tarea jajajajajajaajajajajja =)

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